Hoy os traigo una receta deliciosa si os gusta el queso, son unos Bocaditos de calabacin con patata al cabrales, pero con el toque de casa, ya sabéis que los platos hay que adaptarlos a nuestro gusto, sino no “triunfan” en casa, es una delicia perfecta para un aperitivo o un entrante, sencillo y de sabor delicado.
El calabacín (cucurbita pepo) es el fruto de una planta rastrera originaria de Centroamerica, su cascara es lisa y dura y su color y tamaño varia según la variedad, lo bueno que tiene el calabacín es que es una hortaliza que contiene mucha agua (un 93% aprox.) y es rica en minerales como el potasio, en vitamina C y ?-carotenos.
Es perfecto para utilizarlo en purés, a mi y a los enanos nos encanta el puré de calabacín con quesitos, en tempura o a la plancha, incluso tiene un sabor delicioso en crudo por lo que se puede tomar en ensaladas o como “crudite” para mojar en diversas salsas.
Los ingredientes de esta receta son muy sencillos, calabacín, patata y queso de Cabrales, o un queso similar. No hay que usar mucho queso de Cabrales, ya que es muy fuerte, por lo que es una receta además de muy rica resulta económica, sencilla de preparar y muy vistosa.
Los rollitos son perfectos tanto para un aperitivo como para acompañar un plato de salmón a la plancha o simplemente como entrante. Este plato gana mucho si se toma templado o caliente, por lo que os recomiendo no los dejéis enfriar.
- 4 calabacines pequeños
- 200 ml. de nata para cocinar (un brick pequeño)
- 4 patatas
- 1 puerro (solo lo blanco)
- 1 cuña de queso cabrales (también podéis usar roquefort, blue, gorgonzola)
- 1 cucharada de mantequilla
- Aceite de oliva
- Pimienta blanca ahumada (recién molida)
- Nuez moscada (al gusto)
- Sal
- huevas de mújol, lumpo o salmón (opcional)
- Pelamos las patatas y las cortamos en trozos pequeños, lavamos muy bien el puerro y lo cortamos en rodajitas muy finas.
- En una cacerola ponemos la de mantequilla y sofreímos el puerro hasta que esté transparente, añadimos las patatas, echamos agua hasta cubrir y una pizca de sal y dejamos que cuezan hasta que la patata esté blandita.
- Mientras pelamos los calabacines y con un cuchillo o una mandolina los hacemos lonchas finas (como de 2 o 3 mm de grosor) a lo largo. En la cacerola ponemos los calabacines en una vaporera (un artilugio de esos para hacer alimentos al vapor) y los hacemos al vapor 3 o 4 min.
- Una vez listos los dejamos en un papel absorbente o en un trapito de lino para que suelten un poco el agua y reservamos.
- Cortamos la cuña de cabrales en cuadraditos pequeños y reservamos. Escurrimos el agua de cocer las patatas, añadimos el queso y trituramos con la batidora mientras añadimos la nata poco a poco, de forma que nos quede un puré espeso, tiene que quedar lo suficientemente espeso para que no se salga de los rollitos.
- Probamos y rectificamos de sal y le añadimos un poco de nuez moscada y de pimienta negra ahumada recién molida y mezclamos bien.
- Precalentamos el horno a 180º C, cogemos las lonchas de los calabacines y hacemos un rollito con ellos dejando la parte interior hueca, y para sujetarlos les ponemos un palillo que los atraviese de lado a lado, de ese modo no se desharán los rollitos.
- En una bandeja de horno ponemos los rollitos y los pintamos por fuera y por dentro con un poco de aceite de oliva, los metemos en el horno y los dejamos hasta que estén doraditos, cuando estén los sacamos del horno y quitamos con cuidado el palillo (sino podemos los dejamos),con ayuda de una manga pastelera o de una cucharita vamos rellenando con cuidado los rollitos, cuando estén todos los ponemos en el horno y los dejamos un minuto para que se calienten.
- A la hora se servirlos le podéis poner una cucharadita de huevas de mújol encima y listo, ¡deliciosos!.