Hoy toca que os hable de un documental sobre cocina: Chef?s Table.
Dejo por un día las salas de cine y me quedo en el sofá de casa, con un refresco en la mesa y el mando de la tele en la mano, en la otra mano el del aire acondicionado como no podía ser de otro modo.
Nos metemos en las cocinas de más de treinta restaurantes de élite, sólo en la primera temporada ya son 11 los que recorre David Gelb, el director de esta producción que se ha convertido en algo así como el escaparate de los mejores. Donde todos quieren estar y donde aún no se entiende por qué no hay ningún nombre español.
Chef?s Table es una serie documental original de la plataforma Netflix que dada la calidad de sus contenidos y de su forma de contar sus historias ha sido nominada a los premios Emmy el pasado año en tres categorías diferentes.
LA COCINA ESTÁ DE MODA
Y no lo digo yo, es algo evidente e innegable, quizás el hecho de que tenemos la necesidad de comer varias veces al día, ayude a que cada vez nos importe más cómo comemos y qué comemos.
Pero Chef?s Table no habla solo de cocina aunque obviamente lo haga, además de recetas y platos hay historias, hay vidas, hay procesos vitales, hay errores, hay tomas de decisiones, hay experiencias y eso es lo que le hace tan adictivo.
El primer capítulo de la primera temporada nos lleva a uno de los restaurantes de referencia a nivel mundial en un pequeño pueblo italiano. Un restaurante que no tuvo muy buena acogida por la población local, un cocinero, Massimo Bottura, que no aparece allí de la nada sino que viene de echarle muchas horas de trabajo en otras cocinas, aprendiendo de otros maestros de la mezcla y los sabores.
El segundo capítulo habla de sostenibilidad, de alimentación equilibrada y de la adicción de un profesional de la comida, Dan Barber, por recuperar sabores y texturas, por volver a emparejar al ser humano con la naturaleza, sin aditivos ni añadidos.
Desde la cocina al aire libre de Francis Mallmann a la cocina kaiseki de Niki Nakayama o la curiosidad insaciable de Ben Shewry.
Son sólo algunos ejemplos de los muchos que encontráis en estas tres temporadas en las que los cocineros muestran sus inquietudes dentro y fuera de sus cocinas, algo que hace que les conozcamos y les entendamos un poco mejor.
COCINA NACIONAL
No, aún no ha llegado el momento de hacer una parada en ninguna de las cocinas de los establecimientos españoles.
¿Sorprendente? Sí, mucho pero según el director esto ha sido así porque quiere hacer algo ?realmente especial con España?? según ha comentado en algún medio de comunicación.
Desde luego en España la lista de cocineros que merecen la pena participar en este documental es más que suficiente para un par de temporadas como poco y seguro que se nos quedarían fuera injustamente muchos de ellos.
Las características que debe tener un chef y un establecimiento para formar parte de esta serie son sencillos?? o no: tienen que estar en lo más alto de su profesión, deben tener un punto de vista sobre la comida original y propio, distinto al de la mayoría y para estar donde están, se han visto obligados a hacer sacrificios en sus vidas, personal y profesional.
No es complicado conseguir candidatos siguiendo esas pautas ¿verdad? Seguro que ya tenéis alguno en la cabeza.
El futuro
David Gelb tiene muy claro, después de dirigir tres temporadas de Chef?s Table, que el futuro de la cocina está en la tierra, en la huerta, en las frutas y las hortalizas.
Parece que para los grandes chefs, el tiempo de la carne o el pescado que arrasaban con cualquier otro plato ha pasado a la historia. Ahora las verduras y las frutas en la cocina cobran protagonismo y ganan terreno, algo que deberían hacer también en nuestras cocinas si pensamos en nuestra salud y no, ni es tan difícil ni hace falta ir a un restaurante de lujo para aprender.
Espero que disfrutéis con este increíble documental de Netflix.